Una intensa actividad se ve en torno a la esfera oficial en Villa Gesell, sobre manera en lo que respecta a limpieza, levantado de ramas en la vía pública, retiro de autos abandonados, limpieza de canales, apertura de aliviadores para que las calles se desagoten con mayor fluidez, cambio de luminarias, reparación y construcción de pavimento y otras obras que aunque quizás menores, no dejan de tener importancia a la hora de evaluar tanto la acción oficial como el estado de la ciudad.
En tiempos recientes también se ha visto una acción tendiente a regularizar el servicio de remises, buscando que todos estén en las condiciones de habilitación correspondiente como también que los conductores estén en regla, buscando que todo se encamine antes de la temporada, cuando este tipo de servicios requiere mayor demanda y control.
Al parecer, la administración del intendente Gustavo Barrera, busca aminorar la crítica que en este sentido, muchas veces exacerbada, recibe desde sectores de la oposición que se expresa en el recinto del Concejo Deliberante como en medios de comunicación con un claro sesgo opositor.
En principio, lo que se ve es una gran preocupación del gobierno municipal en pos de la búsqueda de mejorar la imagen tanto propia como de la ciudad, aunque debe decirse que esta situación es una constante del gobierno, con mayor o menor éxito pero siempre en el mismo sentido y debe decirse también que existe una constante de desconocer esta actitud y generar críticas destructivas que no se entienden más allá de las mezquindades de la política mal entendida que solo sirven para profundizar los aspectos negativos que intentan cambiar.
Villa Gesell no escapa a las generales de la actual situación del país, con una profunda recesión, pérdida de puestos de trabajo, baja en el movimiento turístico interno, caída del consumo y con un futuro incierto por el momento, que hace que muchas de sus principales actividades productivas, fundamentalmente el turismo y la construcción, generadoras de empleo en forma constante en los últimos años, hoy pasen momentos de mucha dificultad, imposibles de soslayar y principales responsables del estancamiento que algunos quieren achacar a la falta de mantenimiento de calles, o al recambio de una lamparita, como si se quisiera ocultar la realidad.
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