Demasiado ego y exigua difusión

Comenzó este domingo el desfile de modas itinerantes en los diferentes balnearios de la ciudad. El primero tuvo  lugar en la calle 312 y playa en el balneario “La Punta” con escasa para no decir nula participación de público  en un día que no acompañó por el frio y el viento.

Un mínimo equipo de sonido,  tres o cuatro colaboradores y un reducido grupo de jovencitas que soportó con hidalguía las inclemencias del clima y una alfombra roja que se extiende sobre la arena es la logística de este novedosa  e improvisada propuesta que no se distingue por su imaginación. Pero  no hubo masividad en la difusión del programa de actividades, es evidente que hay una falla en la comunicación ya que los turistas desconocen el itinerario de los desfiles.    

Se sabe que lo nuevo genera resistencia, pero este no es el caso ya que un desfile de modas en la playa no termina de atraer público porque no es atractivo ni es participativo. En realidad la propuesta deja volar la imaginación sobre los costos que debe afrontar la comuna en una oferta turística poco común si se tienen en cuenta los honorarios del diseñador madariaguense Manuel Cabane y la organizadora del desfile Melina Maguth.     

Hasta ahora la gestión de Diego Gherlone mostró, a pesar de su corta estadía en la secretaria de Turismo, escasa humildad, demasiada improvisación y cierta cuota de nepotismo en la designación de sus colaboradores.

Es cierto que se viene de una gestión turística nula, sin ideas ni acciones promocionales, se esperaba algo distinto, más abierto y eficiente, pero hasta ahora sólo se percibe demasiado ego, escasa capacidad y retorica forzada sin olvidar que la cotización de la ciudad depende de esta sensible área.