A un año y poco de las próximas elecciones, preocupa a los que queremos un país para todos, el desencanto generalizado con el actual gobierno.
Hay una razón real para el descontento, que podemos resumir en la inflación que licúa los ingresos y la cuenta pendiente con los más postergados..
Pero la más poderosa es la batalla desigual contra la permanente ofensiva destituyentes a través de los medios concentrados que magnífica los errores, esconden los muchos aciertos del Gobierno y entierran en el pozo de la desmemoria, el desastre de la administración macrista.
Ni la distopía más extrema podría imaginar lo que hubiera sido de nosotros en la pandemia bajo un gobierno de Mauricio Macri, da miedo de sólo pensarlo ..
Está situación me recuerda el filme de Bergman, El huevo de la serpiente, cuando se veían todas las señales de un nazismo surgiente, ante la parálisis de los anticuerpos de la sociedad para evitarlo.
"A través de la fina membrana del huevo de la serpiente, se puede ver al reptil ya formado", sentencia uno de los personajes del filme.
Veo..veo..que ves dentro del huevo de la serpiente..?
A Mauricio Macri restregandose las manos preparado para futuros endeudamientos y fugas, nombrando más jueces amigos para futuras contingencias adversas y apoyando golpes de estado en la región..
Veo a Gerardo Morales prolongando y ampliando la injusticia en Jujuy..
Veo a González Fraga planeando superar su "robo del siglo" al Banco Nación, sin túneles ni escapes cinematográficos..
Veo a Patricia Bullrich imaginando próximos Santiago Maldonado ..
Veo a Martín Tetaz reeditando los créditos UVA ..
Veo a Rodríguez Larreta con sucursales de su inmobiliaria porteña en todo el país y la ministra Acuña prohibiendo el idioma guaraní..
Veo a Pepín Simón en un regreso triunfal desde Uruguay para abrazarse con sus amigos de la Corte..
Veo los recortes en salud y educación, la persecución a opositores y sindicalistas y la cooptación de traidores acomodaticios..
Los cuatro años de neoliberalismo cambiemita ya fueron comedia y tragedia a la vez.
Evitemos que la historia se repita.
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