El respaldo donde se apoya Barrera

Marcelo Martino es sin lugar a dudas el funcionario más comprometido con los temas que provocan opiniones en los medios que están reñidas con la objetividad. El letrado se refirió a la obra de repotenciación eléctrica y aclaró en este tema la postura de Cevige, no es amistosa ni colaboradora. La guerra entre ambas instituciones continua y en este escenario hay demasiada subjetividad y rencores personales.

La situación de Ecoplata  y el transporte público de pasajeros, hoy en manos del mismo empresario, Gustavo Pereyra es una anomalía administrativa, un legado de la administración de Jorge Rodríguez Erneta que heredó Gustavo Barrera. En aquella oportunidad no lo sorprendió porque era integrante de aquella gestión, pero es claro que esas decisiones no pasaban por él.

En esta reunión se revelaron algunos aspectos que antes no formaban parte de las posibilidades inmediatas. El cambio de signo político en la Nación provoca un revisión de todo lo actuado y llevara su tiempo. Esto le da aire a Barrera para preparar su estrategia.

Hasta ahora Barrera  supo esquivar los embates de todos. Salió airoso de las encrucijadas  judiciales que le plantearon, ganó las elecciones por un alto porcentaje de votos y llevó el estandarte del FPV casi en soledad en la región. Ahora deberá probar que puede enfrentar  una gestión de cuatro años ante la adversidad política que lo rodea internamente y externamente.

Martino explica todo, sin embargo la tensión que existe entre Cevige y el Municipio tardará en distenderse. Las heridas son personales y duelen más cuando se trata de ex-amigos. La Cevige tiene responsabilidades institucionales que debe cumplir, no debe enojarse como una novia desairada y tirar su larga y rica historia por la borda.  Negar la información que necesita la obra de repotenciación no daña a la municipalidad ni a Barrera, se menoscaba a la ciudad y sus habitantes