En el aniversario del secuestro de las Madres, familiares y religiosas de la iglesia de la Santa Cruz durante la última dictadura, se realizó un acto en repudio al negacionismo del gobierno de Javier Milei. Este 8 de diciembre, los asistentes denunciaron los planes oficiales para morigerar las penas de los genocidas y la avanzada por liberar a represores detenidos, incluyendo a Alfredo Astiz, responsable directo de aquellos secuestros. La misa y el festival con León Gieco como figura central se llevaron a cabo en un clima de resistencia y memoria.
Los familiares y compañeros de los 12 de la Santa Cruz destacaron que la ofensiva del gobierno no es solo discursiva, sino que avanza con hechos concretos. Señalaron las visitas de funcionarios libertarios a represores en la cárcel de Ezeiza, así como las audiencias judiciales para reducir penas y conceder prisiones domiciliarias a los genocidas. “El plan para la morigeración de las penas y la liberación de represores está rindiendo sus frutos”, denunciaron desde el acto, realizado con la iglesia llena y con la participación masiva de militantes y vecinos.
En una lectura crítica del momento, los organizadores afirmaron que el gobierno de Milei opera a favor de las corporaciones internacionales y no busca destruir el Estado, sino controlarlo para sus propios fines. En este contexto, reafirmaron la necesidad de seguir luchando por memoria, verdad y justicia, haciendo frente al intento de reescribir la historia y deslegitimar la lucha de los 30 mil desaparecidos.
Todos los derechos compartidos