El gobernador de Buenos Aires, Axel Kicillof, amplió la grieta con el presidente Javier Milei durante un acto por el Día de la Soberanía en San Pedro, donde cuestionó abiertamente la política exterior del Gobierno nacional. En su discurso, Kicillof advirtió que la postura de Milei pone en peligro los intereses de la Argentina, destacando que la provincia rechazará la privatización de la hidrovía.
Acompañado por la vicegobernadora Verónica Magario y el intendente local Cecilio Salazar, Kicillof hizo su entrada al evento rodeado de vecinos, militantes y dirigentes gremiales. Durante su intervención, el mandatario provincial hizo un fuerte llamado a defender la soberanía nacional, asegurando que las políticas del presidente actual traicionan esos principios fundamentales.
El acto, al que asistieron intendentes, funcionarios y dirigentes sindicales, también sirvió como homenaje a Hebe de Bonafini, ex titular de Madres de Plaza de Mayo, a dos años de su fallecimiento. Kicillof reafirmó su compromiso con la lucha por los derechos humanos y la soberanía, expresando su firme oposición a las políticas de "los vendepatria" que, según él, amenazan el bienestar del pueblo argentino.
Todos los derechos compartidos