El Gobierno de Javier Milei anunció su decisión de convocar a sesiones extraordinarias en el Congreso, aunque el temario sigue siendo incierto. Uno de los puntos clave de la convocatoria será la reforma política, que incluye la eliminación de las Primarias Abiertas, Simultáneas y Obligatorias (PASO) y la eliminación del financiamiento estatal de las campañas electorales, además de una modificación de la ley orgánica de los partidos políticos. Sin embargo, el proyecto que esperaba discutir el oficialismo sobre el Presupuesto 2025 parece haber quedado descartado, debido a la falta de acuerdo con los gobernadores y al rechazo de sus condiciones.
Entre las reformas propuestas, el gobierno de Milei busca eliminar las PASO, una medida que podría perjudicar a la oposición al dificultar el proceso interno de selección de candidatos. Además, pretende dejar en manos privadas el financiamiento de las campañas electorales, lo que le permitiría al oficialismo recaudar fondos sin la intervención del Estado. En paralelo, se propone una modificación de la Ley Orgánica de los Partidos Políticos para aumentar los requisitos para que un partido obtenga reconocimiento nacional, lo que afectaría principalmente a los nuevos partidos y agrupaciones políticas.
Por otro lado, el tratamiento del Presupuesto 2025 quedó casi descartado de las sesiones extraordinarias, debido al rechazo del gobierno a las demandas de los gobernadores de provincias, quienes piden ajustes en áreas como la coparticipación federal y la distribución de los fondos nacionales. Ante esta situación, el Ejecutivo volverá a prorrogar el presupuesto de 2023, lo que permitirá a Milei continuar con un manejo discrecional de las partidas, mientras que los gobernadores continúan con sus reclamos por deudas y compensaciones. Además, el gobierno busca negociar el apoyo a la reforma política a cambio de tratar proyectos como el de la "Ficha Limpia", que impediría que los condenados en segunda instancia puedan ser candidatos.
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