El próximo fin de semana, Javier Milei realizará su primera visita a Brasil desde que asumió como mandatario argentino en diciembre. Sin embargo, el gobierno brasileño confirmó que no recibió ninguna comunicación oficial sobre este viaje, lo que sugiere que será una actividad privada y no oficial. Este hecho añade tensiones a la ya compleja relación bilateral entre ambos países.
En declaraciones durante una rueda de prensa, la secretaria para América Latina y el Caribe del Ministerio de Relaciones Exteriores de Brasil, Gisela Padovan, informó sobre la falta de notificación oficial respecto a la visita de Milei a la ciudad de Balneario Camboriú. Allí, el mandatario argentino planea participar en un congreso organizado por sectores de la ultraderecha, evento en el que también estará presente el ex presidente brasileño Jair Bolsonaro.
Esta decisión de Milei de optar por el cónclave en Brasil en lugar de asistir a la Cumbre del Mercosur en Paraguay ha generado críticas y controversia. El gobierno brasileño lamentó políticamente la ausencia del mandatario argentino en la reunión regional, aunque subrayó que es una decisión soberana de Argentina.
Este episodio resalta las complejidades y los desafíos en la relación entre ambos países, especialmente en un contexto regional e internacional cambiante.
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