CRONICA DEL AMOR Y DEL ODIO Por Luis Di Francesco

El tribunal negó el pedido de la Vicepresidenta de ampliar su declaración, ante la incorporación de nuevos elementos de prueba traídos de los pelos desde otras causas ya desestimadas.

Le negaron el derecho a ejercer su legítima defensa.
Miles de personas se congregaron a la caída del día frente a la casa de Cristina para hacerle el aguante y fueron reprimidos por la policía de Larreta, hasta que por peso del número se hicieron dueños de la calle.

Una vigilia plena de juventud militante y madurez agradecida.

Día 23

A las 11 de la mañana, Cristina Kirchner desde su despacho en el Senado, comunicó al País el descargo que el tribunal le denegó.

Después de denunciar lo amañado de la causa, la falta de pruebas, la connivencia obscena de fiscales y jueces con Mauricio Macri, hizo incapié en uno de los elementos de prueba incorporados por la ventana por los fiscales.

El peritaje de los chats del teléfono de José López, el de los bolsos en el convento...

Del peritaje surgen seis comunicaciones entre Lázaro Báez y José López, dos de los acusados y supuestos integrantes de la supuesta asociación ilícita de la que supuestamente sería jefa la ex Presidenta.

Seis comunicaciones en un lapso de tres años y con ninguna referencia a Cristina.

Pero se "les pasó" a los fiscales los más de cien chats con Nicolás Caputo, el amigo del alma y testaferro de Macri y otro centener largo con Eduardo Gutierrez, titular de la empresa Farallón.

En esos chats se cruzan pedidos de favores, de adelantos, de reajustes de costos, en medio de un trato casi familiar, especialmente entre López y Caputo.

La Vicepresidenta, con sorna, le pregunta al fiscal como se le pasó esa relación, cómo Luciani no encontró lo que ella sí.

Si hubiera una asociación ilícita sería la de López, Caputo y Gutiérrez, que concretaban en el chat cenas familiares y llamadas a teléfonos "seguros". Y otra vez, cómo en la interrupta investigación del origen de los dólares de los bolsos de López, todo seguimiento sobre supuestos delitos de Cristina, toma los caminos que llevan a Mauricio Macri.

Menciona también el alegato la obra de soterramiento del Sarmiento, que debía ser con financiamiento de las empresas, según la licitación, y terminan siendo financiadas por el estado mediante un DNU que firma Michetti en ausencia de Macri, en beneficio de IECSA, de Macri. El monto de esa obra..45 mil millones, el mismo monto de toda la obra que en Santa Cruz se investiga.

Desde el Senado, Cristina Kirchner hizo su magistral descargo, en la calle, el aguante del amor y la militancia cantando la marcha con Cristina en el balcón.

Y esa es, y no precisa de pruebas, la asociación ilícita que tanto molesta al poder.

El amor de ida y vuelta entre un pueblo y su lideresa. (Si, lideresa, por el agravante de ser mujer).

En un filme de Hollywood la escena siguiente sería la de Cristina libre de culpa y cargo y el juez mandando a esposar a Macri y a Caputo, que insulta a la pasada al fiscal Luciani por traer el teléfono de López, todos presentes en la sala a los efectos de la escena final...

Pero en la Argentina del lawfare, la próxima escena es con cientos de miles de extras en la calle, a partir del día 24.