El turismo en Argentina atraviesa una profunda recesión, con una caída en la llegada de turistas extranjeros y un aumento significativo de argentinos que eligen viajar al exterior. Según el informe de Estadísticas de Turismo Internacional (ETI) del INDEC, en 2024 el país registró un saldo negativo de 2,1 millones de turistas, lo que representó una pérdida de US$ 2.125,8 millones.
Entre los factores que explican esta situación se encuentra la apreciación del peso y el tipo de cambio, que encarecen los costos para los visitantes internacionales y facilitan los viajes al exterior para los argentinos. En diciembre, el turismo receptivo cayó un 41,9 %, mientras que el turismo emisivo creció un 116,1 %. Además, datos de la Administración Nacional de Aviación Civil (ANAC) muestran una disminución en la participación de Aerolíneas Argentinas, lo que afecta la conectividad y competitividad del sector.
Autoridades provinciales, como el secretario de Turismo de La Pampa, Saúl Echeveste, advierten sobre el impacto de estas medidas y señalan la necesidad de políticas que fomenten la llegada de visitantes extranjeros y fortalezcan las economías regionales. En ese sentido, proponen la implementación de un tipo de cambio más competitivo y estrategias para incentivar el turismo interno y receptivo.
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