La Corte Suprema de Justicia de la Nación resolvió cerrar una de las causas más polémicas impulsadas por el exgobernador Gerardo Morales contra Milagro Sala. Se trata de la denuncia por un escrache sufrido por Morales en 2009, durante una protesta en su contra en la que la líder de la Tupac Amaru ni siquiera estuvo presente. El fallo, que cierra un ciclo judicial de 15 años, fue considerado por los abogados de Sala como el fin de una "persecución política".
El máximo tribunal desestimó el recurso presentado por Morales contra la decisión de la Cámara Federal de Casación Penal, que había sobreseído a Sala en la causa de los “huevazos”. Los jueces Horacio Rosatti, Carlos Rosenkrantz, Juan Carlos Maqueda y Ricardo Lorenzetti rechazaron la apelación, desbaratando los intentos de continuar con una causa basada en un hecho ocurrido más de una década atrás.
La causa se originó tras un escrache sufrido por Morales durante una conferencia en octubre de 2009. A pesar de que Sala no estuvo involucrada en la protesta, fue acusada de ser instigadora debido a las declaraciones de un testigo cuyo vínculo con la gobernación de Morales fue cuestionado. El fallo de la Corte ratifica la prescripción del caso, lo que implica el fin de las acusaciones contra la dirigente social, que había sido condenada en 2016 sin pruebas concluyentes de su participación directa en los hechos.
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