LA DERECHA ANTICUARENTENA ES TAN PATRIOTA COMO DICE ?.

Los anticuarentena creen haberse apoderado de las fechas patrias como el 20 de junio, el 9 de julio o el 17 de agosto. ¿Llevar una bandera argentina colgada al hombro o hacerla flamear es hacer patria? No sabía. Creía que hacer patria es mucho más profundo y es un acto más íntimo: es trabajar con honestidad, es querer a tu familia, a tus amigos, es respetar al otro, cuidarlo, pensar en quienes menos tienen y más necesitan, en los mayores, en las niñas y niños que están atravesando este invierno sin las comodidades de otros millones de niñas y niños que sí tienen computadoras para seguir las clases virtuales y después miran películas; en les adolescentes que quieren una formación y estudios para un futuro digno, en las mujeres jefas de hogar que luchan a brazo partido. Hacer flamear una bandera y putear al gobierno que no gusta pero que sin embargo votamos 12.942.896 de ciudadanas y ciudadanos, es de mal perdedor. Pero en tiempos de pandemia es aún peor.

Porque hasta que no esté la vacuna disponible el único remedio es protegernos y quedarnos en casa lo más posible, usar barbijo y alcohol para las manos y no esa imbecilidad egoísta de tomar dióxido de cloro por televisión como nos mostró desvergonzadamente una pseudo periodista queriéndose hacer la canchera. Salir a la calle a manifestarse al divino botón en plena pandemia, no es luchar por la libertad. La libertad es no morirte a los 21 años por Covid y tampoco a los 87. Eso es claramente querer contagiarte y ahí, entonces, ocupar una cama de hospital que quizá la necesite aquel o aquella que se contagió porque está obligado a ir a trabajar para darle de comer a su familia y tiene que tomar un transporte público si o si porque no tiene plata para un remisse.

Está claro que a la derecha le gustan los muertos. Los festeja. Como hizo un joven periodista días atrás cuando un invitado le dijo que en Argentina seguirían aumentando los contagios y los muertos. Eso no se celebra. Eso es para llorar por la falta de conciencia y amor por el próximo. ¿En qué clase de sociedad nos convertimos? ¿Qué clase de dirigencia tiene la derecha que justifica a un ex presidente que está de vacaciones en Saint Tropez, en la región más cara y lujosa de Francia? ¿A quién le mienten cuando dicen que MM viajó para asumir su cargo en la Fundación FIFA si allá el mes de agosto es de vacaciones de verano religiosas como acá el mes de enero?

En París las autoridades decidieron extender y controlar el uso del barbijo y limitar las reuniones a 10 personas porque la Ciudad Luz volvió a ser DECRETADA “zona de circulación activa” de Coronavirus. Sí, decretada.

De este lado del Altántico la polémica no se hizo esperar. Faltó que el ministro de Salud de la provincia, Daniel Gollán dijera que veía una “temporada impensada” mientras no exista vacuna, para que varios intendentes de la costa le saltaran a la yugular. Ese mismo día, Gollán explicó que temporada “normal” no volverá a haber y eso es innegable. Podría haber “temporada con restricciones y protocolos”, agregó. Y es probable que así pueda hacerse si los anticuarentena no terminan de desmadrar la situación en el Area Metropolitana de Buenos Aires, epicentro de la pandemia en la Argentina. Porque de lo contrario nadie nos dejará entrar en la costa a los que somos del AMBA.

Villa Gesell ya está trabajando en un plan sanitario integral para la temporada de verano. Numerosas medidas y protocolos se adoptaron en países europeos para poder disfrutar de las playas, en algunos países con más eficacia que en otros. Pero eso es también mayor conciencia ciudadana. Está claro que las ciudades balnearias no podrán recibir a las decenas de miles o cientos de miles de turistas que en otros años y que deberán mantenerse las medidas de distanciamiento e higiene.

La buena noticia de la semana fue que Argentina y México impulsarán la producción de la vacuna para América Latina y que podría estar lista para fines de año o principios del 2021.

Que tristeza da ver cómo estos anticuarentena son alentados por dirigentes que integraron un gobierno nacional que rebajó el Ministerio de Salud a Secretaría, que dejó de comprar vacunas y que inclusive permitió, por ejemplo en la provincia de Buenos Aires con María Eugenia Vidal a la cabeza, que se vencieran miles de dosis de vacunas obligatorias para niñas y niños que fueron encontradas a principios de 2020 en un depósito en las afueras de La Plata. Otra ilustración del desprecio por la vida.

Y cuando dicen que Argentina tiene la cuarentena “más larga del mundo”, el ministro de Salud, Ginéz González García responde: “sí, y tiene los mejores resultados del mundo”. En todo caso, se olvidan que nuestro vecino Brasil ya supera los 100 mil muertos y los 3,2 millones de contagiados.