QUE LA DEUDA NO NOS CUESTE PRINCIPIOS.

Puede nuestra cancillería hablar de los derechos humanos y políticos en Venezuela, sin anteponer la falta de derechos políticos en Brasil, con un presidente surgido a partir de la proscripción de Lula y sometido a un verdadero genocidio por la irresponsabilidad de Bolsonaro?

Puede nuestra cancillería hablar de los derechos humanos y políticos en Venezuela sin antes hablar de la cacería de ojos y de las violaciones perpetradas por los carabineros y ninguneada por Bachelet y Almagro, dos progres que como tantos otros claudicaron ante el poder de EE.UU.?

Puede nuestra cancillería hablar de los derechos humanos y políticos en Venezuela sin hablar del asesinato de campesinos desde helicópteros y del gobierno golpista de Bolivia?

Puede nuestra cancillería hablar de derechos humanos y políticos en Venezuela sin hablar antes de la persecusión de Correa en Ecuador y la entrega, desde la embajada ecuatoriana que es una extensión de su soberanía, de Julián Assange que allí estaba asilado?

La declaración de cancillería, al respecto de un informe de la Alta Comisionada para los Derechos Humanos de la ONU, Michel Bachelet, además del tema DD.HH. se refiere a los derechos políticos. En ella solicitan al respecto de las próximas elecciones, que sean transparentes, inclusivas y creíbles.
La palabra "creíbles" referida a la próxima elección remite a la insinuación de que la anterior no lo fué (máxime conociendo la pontillosidad en el uso de los términos en el lenguaje diplomático), en franca contradicción con manifestaciones de nuestro presidente que considera legítimo el gobierno de Maduro y no reconoce al autoproclamado Guaidó.

Me gustaría creer que estás declaraciones de la cancillería no tienen nada que ver con la negociación de la deuda.
Me gustaría que la deuda nos cueste sólo dinero, el menos posible, pero sólo dinero...